Requisitos para la matriculación:
PRIMER AÑO | SEGUNDO AÑO | TERCER AÑO |
PRIMER CUATRIMESTRE | PRIMER CUATRIMESTRE | PRIMER CUATRIMESTRE |
Teoría Rogeriana | Ciclos Vitales | Consultoría en Niñez y Adolescencia |
Psicología General | Teoría de la Consultoría Psicológica | Consultoría en Tercera Edad |
Filosofía | Mediación | Consultoría en Violencia y abuso |
Comunicación No Violenta | Focusing | Consultoría en Discapacidad |
Práctica de Counseling | Servicio Solidario | Entrenamiento del Rol |
Métodos de Estudio | Proceso Personal | Práctica de la Entrevista |
SEGUNDO CUATRIMESTRE | SEGUNDO CUATRIMESTRE | SEGUNDO CUATRIMESTRE |
Antropología Filosófica | Fundamento Espiritual | Consultoría Educacional |
Psicología Humanística | Dinámica Grupal | Consultoría en Pareja y Familia |
Enfoque Centrado en la Persona | Psicopatología | Consultoría en Enfermos y Duelo |
Logoterapia | Prevención de Adicciones | Ética y Deontología Profesional |
Proyecto Solidario | Consultoría Psicológica Aplicada | Desarrollo Personal y Profesional |
Psicología Social | Práctica Psico-corporal | Práctica Integral |
Es el único instituto en la Argentina cuyas políticas educativas están basadas en la “Educación Centrada en el Alumno” de Carl Rogers, cuya propuesta es el aprendizaje auto-dirigido y la autoevaluación.
Los docentes no son maestros y evaluadores sino “facilitadores de aprendizaje”.
Es el único instituto en la Argentina cuyas políticas educativas están basadas en la “Educación Centrada en el Alumno” de Carl Rogers, cuya propuesta es el aprendizaje auto-dirigido y la autoevaluación.
Los docentes no son maestros y evaluadores sino “facilitadores de aprendizaje” Nuestra actitud hacia el alumno es la Confianza, como muestra de valoración de su persona para que experimente lo que dice C. Rogers: “Debemos creer en nuestra propia sabiduría”.
La única preocupación de los docentes debe ser brindar la máxima excelencia académica y desarrollar la creatividad, de modo que cada clase dictada sea única e irremplazable y genere en los alumnos deseos de participar y hambre de aprender.
Respecto a la Educación Centrada en el Alumno, Rogers explica cómo se genera el cambio en su manera de enseñar hablando de su propia experiencia, y dice que a medida que en terapia confiaba más y más en la capacidad del individuo no pudo evitar cuestionarse su enfoque en la enseñanza. Si veía a los consultantes como dignos de confianza y básicamente capaces de descubrirse a sí mismos y de guiar sus vidas en un ambiente que Rogers mismo era capaz de crear, ¿por qué no podría crear el mismo clima con los estudiantes y promover un proceso autodirigido de aprendizaje?
Esto es lo que deberíamos lograr todos los docentes, tomar esta actitud respecto de los alumnos: considerarlos dignos de confianza y renunciar a ejercer el poder evaluando o juzgando a los alumnos.
Es indudablemente más fácil y más seguro para los directivos y docentes tener todo controlado exigiendo resultados y constatando permanentemente el aprendizaje, pero eso es priorizar la comodidad de los docentes antes que el aprovechamiento de cada estudiante en particular.
Rogers extrae del diario de una maestra y cita la siguiente frase: “Yo deseo realmente ayudar a mis alumnos a que encuentren el sentido de la seguridad dentro de sí mismos, de manera que el inevitable cambio no los asuste”.
Los docentes deben estar dispuestos a no “manejar” los resultados, sino a dejar en manos de los alumnos el proceso de formación, de acuerdo a las ideas del filósofo Martín Heidegger que dice que “enseñar es dejar aprender”.
No seremos maestros y evaluadores sino “facilitadores de aprendizaje.”
MÉTODO DE EVALUACIÓN
Rogers llega a la conclusión de que: Hay una persona en condiciones de evaluar el grado en que ha alcanzado sus metas, y esa persona es el estudiante mismo.
¿Cuáles son las implicancias de la autoevaluación?
Según Rogers, la propia evaluación del aprendizaje auto-dirigido estimula al estudiante a sentirse más responsable. Por el contrario, las implicancias de una evaluación externa son negativas. Al igual que cuando experimentaba que el foco de la evaluación estaba en sí mismo, el crecimiento personal se veía favorecido, cuando percibe que el foco de evaluación reside fuera de sí, el crecimiento personal se ve obstaculizado.
Si su personalidad es constantemente sometida a enjuiciamientos externos, difícilmente el estudiante llegará a ser lo que realmente es.
En palabras de Rogers: “Si tomamos las concepciones de los demás como nuestras, perdemos contacto con la sabiduría potencial de nuestro propio funcionamiento y perdemos confianza en nosotros mismos (…). Esta discrepancia fundamental entre los conceptos del individuo y sus experiencias reales, entre la estructura intelectual de sus valores y el proceso de valoración propio que permanece desconocido entre sí, forman parte de la alienación fundamental del hombre moderno con respecto a sí mismo”.
En el proceso de evaluación buscamos lograr un equilibrio entre las dos concepciones de evaluación que conviven en Nuestra Institución, por un lado, las ideas de Rogers respecto a las evaluaciones, y por el otro, las exigencias de las normativas vigentes del régimen de evaluación y promoción del Reglamento Orgánico de los Institutos Técnicos de Nivel Superior incorporados a la Enseñanza Oficial. Sin perjuicio en este proceso de desdibujar Nuestra Identidad Institucional.
Buscando una solución equilibrada entre la teoría base de nuestro modelo educativo, y las exigencias de las notas numéricas para la aprobación de las asignaturas, Nuestro Instituto ha adoptado un régimen de evaluación que consiste en:
A) Seguimiento del alumno.
B) Autoevaluación.
C) Coloquio grupal.
A)-SEGUIMIENTO DEL ALUMNO: Garantizamos el seguimiento permanente de cada estudiante y la evaluación formativa correspondiente mediante un sistema de tutoría durante el primer año. Un proceso de desarrollo personal durante el segundo año, guiado por un consultor psicológico designado por la institución para cada alumno. La supervisión de prácticas y desarrollo personal y profesional durante el tercer año, guiado por profesionales de la institución, con la coordinación de los titulares de las cátedras Entrenamiento del Rol y Prácticas
B)- AUTOEVALUACIÓN: “El aprendizaje es evaluado por el alumno, pues éste sabe si responde a su necesidad, si le conduce a lo que quiere saber, si ilumina la parte oscura de la ignorancia que experimenta.” (C. Rogers)
El alumno elige la evaluación numérica que se adecúa a la calificación del aprendizaje significativo, que consiste en que los conocimientos internalizados le hayan servido para modificar su conducta, que los pueda aplicar en su vida diaria y contribuyan a su desarrollo personal.
“Si los propósitos del individuo se satisfacen cuando logra aprendizajes significativos y la función del profesor es la de facilitador, entonces hay una sola persona capaz de evaluar el grado en que ha alcanzado sus objetivos, y esa persona es el estudiante mismo.” (C. Rogers)
No se trata, pues, de evaluar cuanto merece, cuanto se esforzó, ni cuantas páginas leyó, sino cuanto le sirvió lo aprendido para crecer.
Tampoco evalúa solamente lo que aprendió del profesor, sino del proceso de aprendizaje en su conjunto: la enseñanza teórica, la participación grupal, los aportes de sus compañeros, el trato habitual con todo el personal en sus distintos roles y en diferentes situaciones que le brindan la oportunidad de desarrollar la aceptación, la tolerancia, la flexibilidad, el saber compartir y amar.
C)- COLOQUIO GRUPAL: El cierre del cuatrimestre y de cada asignatura se realizará mediante un coloquio grupal, donde los alumnos mostrarán lo aprendido en forma de expresión creativa, cuya propuesta emanará del entusiasmo y la creatividad del grupo.
Los alumnos prepararán un cierre de materia en forma de clase teórica, de trabajo grupal, de actividad lúdica, de dramatización, de parodia, de comedia o de cualquier medio válido para expresarse. Es una representación con moraleja, en la que consolidan lo aprendido durante el cuatrimestre y disfrutan exhibiendo su creatividad. Lo importante de esta muestra es la total libertad que tiene cada grupo para elegir temas y formas que llegan realmente a sorprender al grupo espectador.
Los que observamos este proceso podemos apreciar la sabiduría de Rogers, que pudo vislumbrar con este método resultados tan maravillosos en cuanto a que cada alumno puede asumir la responsabilidad de su formación, tiene deseos de aprender, ansias de crecer, apuesta a su desarrollo personal y elige todo aquello que le sirve para sus objetivos.
Los privilegiados docentes seguidores de Rogers podemos disfrutar de ver cuántas cosas positivas genera en el ser humano el verdadero ejercicio de la libertad.